cocinahorno Patatas gratinadas sencillas
Contenidos
7) A continuación, colocar en una bandeja de horno y extender, sin presionar. Hornear a 170° hasta que se doren (unos 15 minutos). Retirar y decorar con un huevo duro picado, huevo en rodajas, perejil picado y aceitunas.
Hacer unos cortes poco profundos en la grasa de la pechuga de pato. Salpimiéntalas y resérvalas cinco minutos. En una sartén bien caliente, freír primero las pechugas con la parte grasa hacia abajo. En cuanto esté bien dorado, darle la vuelta y freír la parte de la carne, dándole un toque rosado por dentro. Reservar las pechugas en un lugar cálido. Utilizar dos cucharadas de la grasa que se ha formado en la sartén para dorar la cebolla. Añadir la mermelada y luego el vinagre. Cuando empiece a hervir, añade las frutas e incorpóralas a la salsa durante cinco minutos. Cortar las pechugas en lonchas finas y repartirlas en forma de abanico en los platos, colocando la salsa de frutos rojos junto a la carne.
Patatas gratinadas al horno con nata
Preparar la bechamel de la siguiente manera: derretir los 50 g de mantequilla restantes en un cazo, añadir la harina y remover bien; añadir poco a poco la leche, removiendo constantemente hasta que la salsa esté espesa y cremosa. Sazonar con sal, pimienta y nuez moscada. Retirar del fuego y añadir la nata a la salsa, así como los huevos picados y el bacalao y la cebolla.
Disponer las rodajas de patata en una bandeja de horno previamente untada con mantequilla y cubrir con el preparado de bacalao. Espolvorear con el queso rallado y hornear a 180°C durante 20 a 25 minutos hasta que se dore. Servir caliente con una ensalada verde.
Patatas gratinadas con queso
Remojar el bacalao, hervirlo bien, quitarle la piel y las espinas y cortarlo en tiras. Cocer las espinacas, limpias, con un poco de sal, sin agua. Se escurre, se deja enfriar, se exprime bien y se bate. Poner 50 g de mantequilla y los dientes de ajo (machacados) en una sartén. Cuando el ajo esté frito, añadir las espinacas, removiendo bien.
Desmenuzar el bacalao (crudo), quitándole la piel y las espinas y reservar. Rallar la zanahoria con el rallador grueso y reservar. Rallar la cebolla y reservar. Disolver la gelatina en 3 cucharadas de agua tibia y mezclar con el resto del agua fría. Reservar.
Cubrir el bacalao con agua hirviendo, hervir suavemente, escurrir y reservar. Desmenuzar en trozos más pequeños y saltear con aceite de oliva, ajo y pimientos cortados en rodajas largas. Cortar las patatas, los tomates y las cebollas en rodajas. Montar en una sartén o molde, para cocer al vapor los demás ingredientes de la siguiente manera:
Colocar una capa de bacalao ( ya preparado anteriormente), una de patata, una de tomate, una de cebolla y rociar con abundante aceite de oliva. Repetir las capas e introducir en el horno para cocer. Cuando las patatas estén cocidas, estará listo.