Dulces que no necesitan arder
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Ahora, es el momento de derretir la mantequilla, lo que puede hacerse introduciéndola unos segundos en el microondas o calentándola en una sartén al fuego, como prefieras. Cuando esté derretido, añadir las galletas y añadir un poco de leche. Remover bien todos los ingredientes para que se mezclen completamente, y continuar hasta que veamos que se ha formado una masa más o menos compacta.
Elige el molde que vayas a utilizar para tu tarta de chocolate, unta un poco de mantequilla en el fondo y en los laterales y extiende la masa de galletas uniformemente. Meter el molde en la nevera para que la masa se endurezca y empiece a coger firmeza.
Pasado este tiempo, tu tarta de chocolate sin horno estará lista para ser degustada. Pero, si lo prefieres, puedes decorarlo de antemano y añadir otros ingredientes como topping, por ejemplo:
Bizcocho de chocolate con nata y chocolate
En un robot de cocina, triturar las galletas. Añadir el agua y la mantequilla y batir de nuevo. Forrar el fondo de un molde con la masa de galletas y refrigerar durante 20 minutos. Cocer en horno precalentado a 180º durante 15 minutos y dejar enfriar.
Derretir el chocolate y añadir la nata, remover bien. Añadir 150 g de pistachos y mezclar de nuevo. Cubrir la base con la crema de chocolate y espolvorear por encima el resto de los pistachos partidos. Refrigerar durante al menos 1 hora antes de servir. Coge la sartén
Magdalenas que no entran en el horno
2. Con una manga pastelera, colocar las gotas de merengue en una bandeja de horno y hornear a 90°C durante al menos 1 hora, o hasta que los merengues estén bien secos. Si los prepara el día anterior, déjelos enfriar y guárdelos en un recipiente bien cerrado.
4. En una batidora, montar la nata montada hasta obtener la consistencia de una crema espesa e incorporarla con cuidado al dulce de leche con sabor a nueces, removiendo de abajo a arriba en pequeñas ráfagas para que la nata montada se mantenga aireada.
4. Mezclar la leche batida con el coco rallado, añadir la nata montada, removiendo lentamente, siempre de abajo hacia arriba, y finalmente añadir la gelatina delicadamente, hasta que esté completamente incorporada a la nata.